erreapé de pé a pá.

domingo, 26 de febrero de 2012

haces magia y me encanta no pillar el truco ...

Digamos que me siento como cuando te haces una ilusión muy, muy grande, y al final algo hace que falle.
O como cuando te crees que por fin has superado todos tus miedos, y aparece uno nuevo casi más fuerte que los anteriores.
Esto, por no hablar de cuando piensas que alguien va a volver a hacer que seas como antes, que te va a restaurar ese corazón que por ahora está roto y al final... lo acaba por destruir.
Como cuando mis ojos verdes dejaron de expresar para empezar a estar vacíos...


Pero bueno, supongo que no todo puede salir bien siempre.
Aquí os dejo el tema en el que he estado pensando toda la tarde, una tarde de canciones. Nada más...


A lo largo de mi vida he ido dejando pedazos de mi corazón por aquí y por allí, y ahora no me queda el suficiente como para seguir viviendo.


sábado, 25 de febrero de 2012

Supongo que será este insomnio, que sirve para algo.

Y son estas noches en vela que me hacen pensar en cada detalle. Reviso cómo pasan mis días, y es ahí cuando me doy cuenta de que mi vida ha cambiado radicalmente. Es como si hubiera dado una vuelta, trescientos sesenta grados en los que se esconden bastantes más de trescientas sesenta sensaciones, trescientos sesenta pensamientos y trescientos sesenta motivos para seguir adelante.


Antes de ayer luché por conseguirte, ayer luché por olvidarte, ¿pero hoy? ¿ a qué estamos jugando hoy?
La verdad es que me encanta que juguemos. Pero con dos condiciones. La primera, es que no sea con los sentimientos, y la segunda, aparece cuando la primera no se cumple, y es que al menos yo no vuelva a perder.

El miedo a perder nunca me ha impedido jugar, pero tengo un problema si al perderme hace un año aún no me haya encontrado. 

Al menos me consuela saber que tú a mí también me echas de menos. Vives tristemente engañado pensando que no, pero yo lo sé. Porque los amores de verdad son eternos. Y en el fondo, yo también vivo tristemente feliz y engañada pensando que te he olvidado. Pero al menos, he aprendido a ser feliz contigo y sin ti.

jueves, 23 de febrero de 2012

A estas alturas... tengo claras tres movidas.

1- Volviste para abrirme las heridas.
2- Intento olvidarte con alcohol.
3- Por desgracia, pierdo la razón con tus caricias.